COMPLEMENTOS
Uno de los complementos finales en nuestro armario ciclista puede ser una bandana de ciclismo para aislar tu cabeza del casco, una clásica gorra ciclista o bien una braga ciclismo al que le puedas dar múltiples funciones.
El sol, la lluvia, la nieve y el viento son a diario elementos comunes a los deportes al aire libre. Dependiendo de la estación del año, las condiciones climáticas son del todo cambiantes. Especialmente en las zonas con altitudes destacadas, en el verano la temperatura puede llegar a ser bastante fría y el viento sopla con más fuerza de lo habitual. Para contrarrestar estas circunstancias específicamente, la humanidad inventó hace ya bastante tiempo, algunos complementos para nuestra protección. La cabeza es una de esas partes del cuerpo que no le prestamos tanta atención, pero que se enfría muy rápidamente y que se encuentra relativamente desprotegida de la exposición excesiva al sol. Para ello y para estar cubierto ante todo tipo de climatologías, existen distintos complementos para la protección de esta zona del cuerpo en concreto, como gorras, bandanas, cintas.
GORRAS DE CICLISMO
Si te apasiona el mundo del ciclismo y disfrutas viendo las fotos y vídeos de las carreras clásicas y los ciclistas míticos ya sabrás que un elemento que nunca faltaba era la gorra. Tan indispensable como hoy lo es el casco, la gorra servía para identificar a cada ciclista durante la carrera, marcaba estilo y se aprovechaba también incluso para incluir sponsors.
Pero el uso de la gorra de ciclista no es algo que sólo pertenezca al pasado. De hecho, en la actualidad cada vez está más de moda, y es que se trata de un elemento muy útil para proteger la cabeza y la cara del sol, la lluvia, del frío o de la acumulación de sudor, como también ocurre con otras muchas prendas ciclistas que desempeñan la misma finalidad con el resto de nuestro cuerpo. Es indudable que el casco es una medida de protección a la que no podemos ni debemos renunciar, pero lo cierto es que no cubre todas las ventajas que tiene el uso de gorra.
Ventajas de las gorras ciclistas
Son ideales para las épocas de entretiempo de primavera y otoño, las estaciones donde más kilómetros solemos recorrer.
Nos protegen eficazmente del sudor, del frío moderado, o de los temidos y perjudiciales rayos de sol, tanto en la zona del cuero cabelludo como en la nuca.
La gorra es perfecta para evitar, no sólo los efectos del sol, sino para protegernos del molesto sol directo en los ojos, que en ocasiones nos impide o perjudica la visión.
Debido a su reducido tamaño o facilidad para ser guardada incluso en el bolsillo trasero del maillot, te podrás proteger del sol incluso sino es dando pedales, cuando paremos a almorzar o a tomar algo, por lo que estaremos protegidos en todo momento siempre que queramos, dentro o fuera de nuestra bici.
Incluso nos puede resultar refrescante si en una de esas paradas aprovechamos para mojarla o refrescarla y de esta manera nos ayudamos a soportar o sobrellevar mejor las altas temperaturas. Sin olvidarnos por supuesto de colocarnos de nuevo, nuestro obligatorio casco ciclista para protegernos.
Por eso las gorras de ciclismo han vuelto con fuerza en los últimos años, eso sí, siempre combinadas con el uso de casco.
¿Cómo y cuándo usar las gorras de ciclismo?
Las gorras de ciclismo deben ir siempre colocadas bajo el casco para aportar un plus de protección, y al ser de tela o tejidos finos, resultan bastante cómodas.
A la hora de su utilización aunque no existe duda de que de la manera que sea, pero irán bajo el casco, son diferentes las formas en las que se pueden colocar, siempre en función de las preferencias de cada ciclista. Con la visera hacia adelante o hacia atrás, por ejemplo. Hacia adelante nos permitirá estar protegidos del sol y de sus reflejos, y con la visera hacia atrás protegeremos nuestra nuca. Además y por consiguiente, a la hora de llevar consigo estas gorras de ciclismo tanto en la ciudad, como en la carretera y montaña, protegeremos del sol no sólo la parte delantera o posterior de nuestra cabeza, sino también la parte superior de la misma. Ten en cuenta que los cascos de ciclismo tienen siempre unas aberturas en esta zona para evitar que se concentren el calor y el sudor, y de la misma forma le permitan transpirar, pero a la vez dejan también pasar los rayos del sol. De esta forma, si colocamos una gorra para ciclismo debajo de nuestro casco, evitaremos esta exposición al sol. Además, los tejidos transpirables de los que están compuestos estos equipamientos ayudarán a secar y evacuar el sudor de forma efectiva, aportando un extra de comodidad.
El uso de la gorra ciclista no sólo es exclusivo del verano o de aquellas épocas con temperaturas algo más medias. Otros muchos ciclistas también las usan en invierno para resguardarse del frío, que igualmente se cuela por los agujeros del casco, o para protegerse de las condiciones climatológicas o meteorológicas adversas, como el viento o la lluvia. Es por ello por lo que un poco dependiendo de su uso debemos comprar gorras de ciclista de tejidos muy ligeros y transpirables si realizamos nuestro deporte en época estival, mientras que en invierno lo más adecuado sería comprar gorras para ciclismo más gruesas, con efecto cortavientos e impermeables.
Comprar gorras para ciclismo:
Lo más importante es que, elijas la gorra de ciclismo que elijas, te la coloques siempre de forma adecuada, debajo del casco, y debe quedarte como un guante. Es decir, debe adaptarse perfectamente a nuestra cabeza sin presionarnos, ni que nos quede demasiado holgada o suelta. De esta forma podrás colocarte encima y bien, el casco, sin perder fijación ni seguridad. Es importante que nos cercioremos, aunque nos parezca una obviedad, de que cuando nos ponemos el casco encima de la gorra éste no quede ni torcido, ni suelto, sino recto y bien encajado, sobre todo por cuestión de seguridad. Evidentemente, la visera no debe interferir en ningún momento con la colocación del casco.
Si por más vueltas que le das o la cambias de posición, todavía no acabas de apañarte con el uso de la gorra para ciclismo, eso no significa que debas renunciar a ella, muchos ciclistas optan por llevarla en algún bolsillo para poder ponérsela en cuanto paren y se quiten el casco. Así tendrás protegida tu cabeza del sol durante las paradas, y en todo momento.
A la hora de comprar gorras de ciclismo debemos tener en cuenta algunas de las siguientes pautas o consideraciones como; el tipo de gorra que mejor se ajuste a nuestras necesidades o que más cómoda nos resulte, con visera o sin ella, o el tipo de tejido en que estén fabricadas;
Tipos de gorras para ciclismo
Fundamentalmente, existen tres tipos de gorras para ciclista, que las podremos clasificar en las siguientes:
- Gorras para ciclistas con visera: es la que incorpora, como su propio nombre indica, una pieza más rígida para dar sombra o proteger, la cara o la nuca, depende del uso que le demos.
- Gorras de ciclismo de tapón o sotocasco: en este caso, más lejos de parecerse a una gorra, podríamos decir que se parece más bien a un gorro, ligero y totalmente ajustable que se coloca bajo el casco, sin ningún tipo de visera ni de añadido complementario.
- Gorra de ciclista de campaña: este tipo de gorra, podríamos decir que es una de las más completas respecto a protección ofrecida, ya que incorpora una visera para la cara y una tela trasera para cubrir también la nuca.
La visera
Son muchos los detalles que podremos valorar a la hora de elegir un tipo u otro de gorra pero, una característica fundamental y que debemos analizar con cierto detenimiento es el tipo de visera que tienen incorporada. Se trata de una visera que debe ser corta, por tres motivos fundamentales: por un lado, para evitar que interfiera con la visión del ciclista, por otro para que se ajuste bien a la cabeza, y por último y primordial, para evitar que el viento en contra pueda levantarla o restarnos velocidad.
El tejido
El tipo de tejido es fundamental para conseguir una correcta protección frente al calor y una adecuada transpirabilidad en verano, o por el contrario, una correcta impermeabilidad o protección frente al aire o el viento, en el duro invierno.
El tejido y el diseño de la gorra ciclista serán los que nos vayan a marcar la diferencia entre las gorras de gama baja y las de gama media, o alta. En este aspecto debemos tener en cuenta que la mayoría de las gorras de ciclismo de calidad están fabricadas combinando fibras naturales como el algodón con tejidos técnicos como el poliéster, que son los que aportan una mejor flexibilidad y ergonomía. Algunas de más calidad incluso, incorporan tejidos cortavientos e impermeables.
PAÑUELOS: BANDANAS, BRAGAS Y CINTAS
Una alternativa al uso de este tipo de gorras ciclistas es comprar bandanas para ciclismo, también denominadas pañuelos piratas. Hasta hace unos años, ésta era la opción más habitual elegida por los ciclistas para llevar bajo del casco debido a su comodidad y ajustabilidad. Esto es así porque este tipo de gorros suelen tener la forma de la cabeza preformada, y acaban en la parte de atrás con dos tiras alargadas que se atan para ajustarlo.
Una de las misiones fundamentales de las bandanas para ciclismo o pañuelos piratas para ciclismo consiste en aislar la cabeza del sudor y protegerla a su vez, de los rayos directos del sol. Pero tienen el inconveniente, como ya sabemos con respecto a las gorras, de no proteger ni la cara ni la nuca de los rayos solares cuando montamos sobre nuestra bici.
Sin embargo, otra de las ventajas que nos ofrecen también este tipo de pañuelos para ciclismo, es su precio, ya que se podría conseguir uno que le proteja de estos temidos rayos del sol, y del viento, a precios muy económicos.
Otro tipo de pañuelos o una modalidad diferente a los anteriores, que también podemos encontrar en el mercado ciclista, son las bragas de ciclismo para el cuello. La principal ventaja que las hace diferentes con respecto a los anteriores, son su versatilidad, puesto que son prendas que no sólo se utilizan para el cuello y parte de la cara, sino que también pueden estar pensadas, por ejemplo, para cubrir la cabeza. Dependerá del uso que le vayamos a dar.
Su bajo coste económico es una buena ventaja que comparten con los nombrados ya, pañuelos piratas o bandanas, por lo cual esto tampoco sería excusa para disponer de uno de ellos en nuestro armario. Los principales materiales en los que se fabrican este tipo de prendas de moda para ciclistas, son dos: la lana o el poliéster. Por lo que si tuviéramos que elegir entre ambos, recomendamos siempre fibra de lana natural, de alta calidad que nos garantice calidez, comodidad y funcionalidad. La lana Merino es la lana más fina del mundo, tiene muy buena apariencia, es suave al tacto, no pica, no produce electricidad estática y sienta como ninguna otra, por ello es por lo que actualmente suele ser uno de los tejidos más buscados. Pero recuerda, siempre la decisión final del ciclista dependerá de las características personales y climatológicas que cada uno vaya buscando y con la cual se sienta más cómodo.
Este tipo de prendas es perfecta para las cuatro estaciones del año y para cualquier otra modalidad del deporte en que lo queramos utilizar, incluyendo senderismo, correr, esquiar, escalar, etc. Respecto a su rendimiento, y siempre dependiendo de la calidad de la misma, suelen ser prendas totalmente transpirables y absorbentes, que nos ofrecen un gran aislamiento y una baja permeabilidad del aire que nos mantendrá calientes en invierno, pero frescos en verano.
Este complemento ciclista responde también a una gran variedad de colores. El principal suele ser el negro, aunque también existen prendas de casi todos los colores y diseños, dando así respuesta a todos los gustos. En lo relativo a la talla de estas piezas, suele ser única, y vale para ambos sexos.
Los pañuelos no sólo presentan un diseño único, como ya hemos visto en el mercado existen en multitud de modelos, ni sólo están pensados con una única funcionalidad, al contrario, existen diversos tipos según la función con la que han sido pensados. Este es el caso, como última modalidad de pañuelos que vamos a detallar, de las cintas ciclistas, cuya única y principal función consiste en retener o desviar el sudor para que no nos resulte incómodo sobre nuestra bicicleta. Estas cintas para la cabeza, resultan ideales tanto para absorber el sudor en verano, como para proteger tu frente y orejas del frío en invierno. Las características suelen ser similares a las anteriores, también nos encontramos ante tallas únicas, y en este caso suelen ser todavía más ajustables gracias a su tejido elástico que hace que quede totalmente adaptada a nuestra frente, no permitiendo así la caída de este molesto sudor. El principal inconveniente que suponen este tipo de prendas es que no cubren de ninguna manera de los rayos solares, puesto que su finalidad como ya hemos visto es otra bien distinta, por lo que si vamos buscando cubrir esta necesidad, deberemos enfocar nuestra compra en cualquier otro modelo de los mencionados anteriormente. Estas cintas sobre todo están enfocadas a aquellos bikers que el sudor en concreto, les proporciona un gran inconveniente sobre la bicicleta ya que sudan más de lo habitual y les resulta de lo más incómodo, para lo cual se ayudan de este complemento ciclista el cual les mantiene un poco más secos y cómodos, sobre todo en esta zona de la cara.